Resumen
¿Es natural que las princesas sean bonitas? ¡Por supuesto que no! También puede haber princesas feas. Desafortunadamente, Hero-sama no vino a rescatarme y el príncipe ni siquiera se molestó en mirar en mi dirección. Debe ser por mi apariencia. Pero no me rendiré. ¡Lo haré lo mejor que pueda!
Hannah, la primera princesa del Reino Britonis, seguía siendo una princesa a pesar de no ser convencionalmente hermosa. Fue secuestrada y mantenida cautiva por los secuaces del rey demonio, pero su apariencia impidió que nadie acudiera en su ayuda. Decidida a salvarse, Hannah se embarca en una peligrosa aventura que la llevará por todo el mundo. Sabe que debe trabajar más duro que nunca porque su fealdad no le deja otra opción.