Resumen
¿Alguna vez quisiste renunciar a todo y reservar un billete de ida al paraíso? Bueno, Yeonwoo hizo precisamente eso. Al llegar a Okinawa en una bochornosa noche de verano, está lista para relajarse en su hotel con una cerveza fría y conocer a algunos chicos lindos. Ah, espera, el hotel se ha quemado. Sin inmutarse, decide darse un chapuzón desnudo y elaborar un plan de acción. Pero a mitad de la natación, se mete en problemas y es salvada por un hombre misterioso con un casco. Ella se despierta en la Pensión Yururi y pronto decide quedarse (el hombre del casco que resulta ser un bombón puede haber jugado un papel). Después de todo, cuando el paisaje es tan hermoso como el personal y los invitados son así, ejem, abierto... mente, ¿quién querría irse?