Resumen
“Nunca me habían tocado tan suavemente así…” El dedo de un hombre acaricia mi piel suave y clara que se vuelve rosada. ¡Cuando me frota las bragas, gimo espontáneamente…! Mi marido ya no quiere tocarme, le dice Nozomi, una mujer casada, a su mejor amiga. Entonces, su amiga le recomienda “un salón de tratamientos de belleza sexual para mujeres”. Nozomi, que no soporta ser asexuada día tras día, reserva una sesión de tratamiento de belleza, pero ¿¡la esteticista que aparece frente a ella es Keita Igarashi, su ex compañera de clase!? "Tu piel es hermosa". El compasivo masaje de Keita relaja el tenso cuerpo de Nozomi. ¡Él le quita las bragas y frota sus áreas privadas expuestas…!